El perro ventrilocuo
Un hombre está sentado en un parque ante un seto. Oye voces, se aproxima y encuentra a dos perros hablando…
– Pero, ¿sabeis hablar?
– No, responde uno de ellos, sólo lo sé hacer yo, que soy ventrílocuo.
– Pero, ¿sabeis hablar?
– No, responde uno de ellos, sólo lo sé hacer yo, que soy ventrílocuo.